Lo que me habría gustado saber antes

La experiencia fue inolvidable. Las vistas desde la habitación en el piso 54 eran espectaculares, y la cama ultra cómoda garantizó un buen descanso. El desayuno es uno de los mejores que he disfrutado, y la atención al cliente fue impecable. No te pierdas el sky bar. aunque un poco caro, el ambiente lo vale.

Las vistas desde la habitación son impresionantes, y el desayuno ofrece una gran variedad. Recomiendo visitar el bar de la azotea al atardecer.

Las instalaciones del hotel son impresionantes, especialmente las vistas desde el rooftop que son realmente memorables.

El servicio al cliente deja mucho que desear, ya que fue complicado obtener una hora adicional de check-out a pesar de haber consumido en el hotel.

Nuestra experiencia fue bastante buena. La habitación que elegimos era increíblemente amplia y cómoda, lo que hizo nuestra estadía mucho más agradable. Además, el desayuno era uno de los mejores que hemos probado, con una gran variedad de opciones que satisfacían todos los paladares. La ubicación es excelente, ya que está cerca de sistemas de canales y la orilla del río, perfecto para aquellos que buscan explorar la ciudad. Las vistas desde la azotea son impresionantes, y realmente se siente como un lugar ideal para sacar fotos y disfrutar de un buen trago al atardecer.

Sin embargo, el costo de la comida y bebida en los restaurantes del hotel es excesivo para lo que ofrece.

las cucarachas en la habitación fueron una deliciosa sorpresa, no esperaba menos en un 5 estrellas. Y cuando un zumo de naranja para mi niño costó 25€, no sé si reír o llorar. Deberían haberme dado algo especial por aguantar estas travesuras, pero parece que el trato estelar no es para todos.

Las vistas desde el rooftop son espectaculares, un verdadero deleite que no me cansé de disfrutar. La suite que elegimos era espaciosa y ofrecía un panorama impresionante del río, ideal para relajarse después de un día explorando la ciudad.

Sin embargo, al entrar al hotel, nos sorprendió la política de fianza exorbitante, además de tener que pagar de nuevo el costo de la estancia al salir. La habitación precisaba algunas reformas, el mobiliario mostraba signos de desgaste, y los ruidos provenientes del baño del cuarto colindante resultaron ser un poco molestos. En ciertas áreas, como la entrada, tienen protocolos algo excesivos, donde el vestuario de los huéspedes dictaba si podían acceder a la terraza. Por lo que se ve, se aprovechan de las oportunidades para facturar a los visitantes.

un verdadero oasis de comodidad que te hace sentir en casa.

habitación espaciosa, desayuno excepcional

precios de bebidas elevados

Buenos desayunos y vistas extraordinarias.

Hermosas vistas y buen servicio

La ubicación es perfecta, cerca del Chao Phraya y con fácil acceso a muchas atracciones. La suite que tuvimos era grande y cómoda, con unas vistas espectaculares. El bar en la azotea es genial para un trago al atardecer. Sin embargo, el acceso al hotel es un poco raro, pues no hay una entrada principal clara.

Desayuno espectacular y vistas increíbles, pero el wifi falla mucho y es lento.

un hogar lejos de casa con un desayuno increíble y vistas inolvidables

Lebua At State Tower es una joya en Bangkok. Mi estancia fue maravillosa, destacando la amplitud de la suite y la calidad del desayuno. La atención del personal fue excepcional. Las vistas desde la azotea son impresionantes. Definitivamente regresaré.

puedo recomendar este hotel a todos for una parada de una noche

Magnífica habitación, magnífica ubicación, desde donde se puede caminar fácilmente a lugares emblemáticos como el Icon Siam, y disfrutar de un desayuno excepcional, muy bien servido, todo acompañado de un personal muy amable que nos ofreció atención en español.

Todo fue genial

Desayuno excepcional, habitación amplia y cómoda. Ubicación cerca del Chao Phraya, ideal para explorar la ciudad. Personal muy amable, incluso con atención en español. Las instalaciones son impresionantes, pero los precios en los restaurantes son elevados.

Las instalaciones son impresionantes, especialmente las vistas desde el rooftop que son realmente memorables. Disfruté de un buen desayuno variado, lo que me ayudó a empezar el día con energía. Fui a un bar en la azotea que es perfecto para relajarse con amigos después de un día explorando.

Los precios son excesivos, incluyendo la coctelera y las comidas. La atención al cliente no fue buena, ya que no me dieron una hora adicional de check-out a pesar de haber consumido en el hotel.

Vistas espectaculares e habitación ampla. O servizo moi atento, sempre co sorriso. O único que non me gustou foron os prezos algo altos na comida, e que a piscina estaba fría. Pero en xeral, foi unha experiencia fantástica, volvo sen dubidar!